¿El kefir y los búlgaros son lo mismo?

Aunque muchas veces se usan como sinónimos, en realidad “kéfir” y “búlgaros” no son lo mismo. El kéfir es la bebida fermentada, mientras que los búlgaros son los nódulos de microorganismos responsables de la fermentación. Esto aplica tanto para el kéfir de leche como con el kéfir de agua, aunque de este último sus nódulos también reciben el nombre de tibicos.

Para que quede más claro, imagina que tienes una taza de té. El kéfir es como el té ya preparado y listo para beber, mientras que los búlgaros son como la planta con la que preparas la infusión. Algunas personas llaman “té” tanto a la planta como a la bebida, del mismo modo que algunos utilizan “kéfir” para referirse a los granos y a la bebida resultante.

Kéfir de leche y de agua

¿Qué son los búlgaros?

Los búlgaros, también llamados nódulos de kéfir, son pequeños conglomerados de bacterias y levaduras que transforman líquidos en bebidas probioticas. Estos nódulos tienen una apariencia similar a pequeños trozos de coliflor, aunque en el caso exclusivo del kéfir de leche se pueden clasificar en tres tipos de búlgaros según su forma.

Beneficios de los búlgaros

Si buscas mejorar tu salud digestiva, fortalecer tu sistema inmunológico o simplemente darle un empujón extra a tu bienestar, el kéfir es una excelente opción. Tanto el kéfir de leche como el de agua son ricos en probioticos, esos microorganismos benéficos que ayudan a equilibrar la flora intestinal y mejorar la absorción de nutrientes.

¿Cómo se usan los búlgaros?

Es más fácil de lo que crees. Para preparar kéfir de leche, solo necesitas agregar los nódulos a la leche y dejarlos fermentar por unas horas. Si prefieres el kéfir de agua, basta con sumergirlos en agua azucarada y esperar uno o dos días. Lo mejor de todo es que los búlgaros son reutilizables; solo necesitan ser “alimentados” con leche o agua azucarada para seguir trabajando.

Frasco con tibicos - kéfir de agua

¿Dónde conseguir búlgaros?

Si quieres empezar con tu propio cultivo de kéfir, puedes encontrar búlgaros en tiendas de productos naturales o en tiendas online. Otra opción es preguntar a alguien que ya tenga, porque suelen multiplicarse y muchos están dispuestos a compartirlos.

Espero que esta información te ayude a dar tus primeros pasos en el mundo del kéfir y la fermentación. Si tienes dudas o comentarios, ¡te leo abajo en los comentarios! ¡Nos vemos en el próximo artículo!

Ingeniero civil de profesión, pero amante de la naturaleza y la buena comida. Desde niño me ha emocionado observar las plantas, animales y hongos. Me encanta aprender nuevas cosas sobre el mundo que nos rodea, por lo que he decidido compartir mis observaciones y conocimientos a través de este medio.

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